Al otro lado de la mirada.

El dilema detrás del suspiro y ese lugar y ese libro al que quiero ir.
Y ese dilema que no puedo o me prohíben resolver, dicen que lo prohibido significa hacer las cosas sin que nadie vea. ¿No me veo yo misma?, huir, hacer lo un viernes, hacerlo mañana que es viernes o esperar otros horribles 8 días más, escuchando las mismas palabras y con la certeza de saber que "Estoy hecha para planes más grandes", volviendo a la realidad, ¿Dónde estoy? - pues en el mismo sitio de ayer, de antes de ayer, de la semana pasada, del mes pasado, del año pasado e inclusive de hace 5 años, viendo las mismas caras, peleando por las mismas cosas, sintiendo lo mismo paso tras paso, y por supuesto con las mismas ganas y ansías de cambio ¿soy el cambio? probablemente y la cuestión es ¿Por qué poner esto en un blog? ¿Para que colgarlo en la red? pues no lo sé, la respuesta esta quizás en el mismo sitio que están todas las demás y los Artic Monkeys me acompañan esta vez, en este escrito y aquella suerte de escapar que ambos me desearon, no escribiré sobre eso, o ¿Ya no lo he venido estado haciendo desde hace un buen tiempo? -vuelvo al "no lo sé" y esta noche me he soltado entre música y deberes y monotonía que me ahorca cada vez más fuerte y un arte que no sé si es mío o del viento.

Y la mirada sigue fija, y sigue tal vez distante, paradogícamente,¿absurda e insensata? - sumergida en el mismo mar, el mar de humores y voces, llantos y reclamos, quejas y sorpresas.

Y ganas de ir al otro lado del mar.

Y esta taza de café que solo esta en este escrito y en la mente.